—
LA HORA DE TODOS / Víctor Contreras
“Después de mí, sigues tú”: AMLO a Marcelo
Y el peligroso juego de jugar a las ‘vencidas’
Cuando la semana pasada el ex Canciller, Marcelo Ebrard confronta a Sehinaum y a la dirigencia nacional de Morena, en la última y decisiva fase de la carrera presidencial, en realidad su pleito no es con Claudia, la aspirante consentida, ni con Mario Delgado, sino con su amigo el todopoderoso presidente Andrés Manuel López Obrador.
“En los últimos días vemos un incremento del acarreo, brigadeos por parte incluso de servidores públicos, campaña sucia e intimidación”, dijo acusando al jefe de prensa, Jesús Ramírez Cuevas.
Decir, golpeando la mesa, alzando la voz, reclamando en público: ¿Es Claudia o yo?, es un reto, un desafío, una confrontación, un tú a tú con su amigo, con el compañero de luchas, su cómplice, con quien hizo el trato histórico: “¡después de mí, sigues tú!
Este reclamo, entró en la dinámica de, el peligroso juego “de jugar al as vencidas” con quien tiene más poder y fuerza que tú. Y la llevas de perder. Es pelear con un presidente “con un acendrado y rancio priismo” que se convirtió en el presidente más poderoso en los últimos cien años de este país.
Confiado, Marcelo nunca se acordó que su amigo, ha traicionado a todos aquellos que lo han servido, los que han llevado la cúspide. Primero los usa, los pone de rodillas, los escupe y después los pisotea, sin ningún rubor, sin un cargo de conciencia, lo que es peor, lo hace con un desequilibrado placer ‘sadico’.
El aspirante ex priista y hoy morenista, que estuvo en los límites de lograr su sueño máximo dorado que guardó durante 40 años soñó con ser presidente de México, reclama que existe un “acarreo monumental”, “una simulación”, encuestas falsas pagadas, y financiamiento público para Claudia Sheimbaum.
Sin embargo, el planteamiento de Marcelo Ebrard, es cuestionable: ¿si va a arriba para qué confronta? ¿para qué se queja?
Lo que no nunca quiso aceptar Marcelo es una realidad: el coordinador de la campaña de Claudia es el todopoderoso AMLO.
Exige que los ciudadanos elijan “libremente” en la decisiva encuesta del 28 de agosto, cuando el coordinador de Claudia, AMLO, tiene 24 de 32 gobernadores en el país y el mismo número de Delegaciones del Bienestar para decidir quién será el ganador del llevada y traída encuesta.
Acarreo o no, pero Claudia Shembaum, hizo actos proselitistas masivos, con la raza, “primero con los pobres”, con los de abajo, con “los de a píe”.
En cambio, Marcelo, se promovió solo en los medios y en las redes sociales, en actos pequeños, “de cuadro chico” como le llaman los mercadólogos. Fue una aspirante “Fifi”. Salvo algunas veces que se atrevió a hacer el ridículo, bailando el “no rompas más mi pobre corazón” del grupo musical Caballo Dorado, que, al verlo bailar, era la misma imagen que mostró en campaña: nunca se acopló al ritmo del presidente y perdió el paso.
“La razón es que les vamos a ganar la encuesta y quieren impedirlo”, dijo en forma molesta en la histórica conferencia, amenazando que el futuro del movimiento está comprometido y “será un desastre”.
“Nunca he sido un traidor”, aseveró, y dejó la puerta abierta a jugar por la libre, con el Partido Movimiento Ciudadano y en su caso unirse al Frente Amplio por México que encabeza Xochitl Gálvez.
ENCUESTA VALIDA, LA DE ALMO. No hay otra.
En las encuestas de febrero a mayo del 2023, al menos de las cuatro principales empresas demoscópicas que analicé, Marcelo nunca rebasó a Claudia, aunque algunas veces se le aproximaba.
Las empresas vistas son Mitofsky, Massive Caller, Rubrum, Arias, El Universal, El Financiero, El Heraldo y SDP Noticias.
Adán “el Patán”, así le llaman sus malquerientes, se abrió paso a codazos reales en los mítines que le organizaban sus operadores. Sus críticos aseguran que “llego tarde a la campaña”. Nunca rebasó el 15 %.
Gerardo Fernández Noroña como Ricardo Monreal, jugaron dulce encanto de participar “para ver que nos toca en la siguiente”: el premio de consolación por obtener si acaso un 5.5 % .
Dicen los socarrones que quien paga, gana las encuestas. Lo cierto es que aquí presentamos a siete empresas demóscopicas.
Durante el mes de Febrero pasado, Claudia y Marcelo eran los punteros en las con un porcentaje que oscilaba entre el 17 al 37 % porcentuales.
Mifosky le daba un 30.2 % contra un 23 %. Es decir, una diferencia de 7 puntos porcentuales.
Massive Caller, otorga a Claudia 37 puntos % mientras que Marcelo se queda abajo con un 36.1 %. Un punto de diferencia.
Las Encuestadoras Rubrum y Arias, ponen a Marcelo por arriba de Claudia con un 2 %. Es decir, 19 contra 17 y 24 contra 20 %. En las seis empresas, la media se manejó entre 4 y 6 puntos porcentuales durante febrero.
En marzo, en todas las casas encuestadoras se fue arriba Claudia salvo en Rubrum Marcelo obtuvo 39.1 contra 32.2 %. Es decir, siete puntos arriba.
En abril sucedió lo mismo. Rubrum le da 41 % a Marcelo y a Claudia 32. Otra vez, una diferencia de 8 puntos. Las demás sitúan a Claudia por encima del ex canciller.
El mes de mayo fue decisivo, porque todas las casas encuestadoras marcan una gran diferencia de aceptación entre el electorado o la ciudadanía. El periódico El País, algo inusitado, da un 51.5 a Claudia contra 33.3 % de Marcelo. Es decir, 28 puntos arriba. ¿El periódico El País venderá el sesgo o tendencia o resultado de sus encuestas?
Mientras el periódico El Financiero marca otra diferencia abismal de 50 % contra 26.5%. Grave o abismal la diferencia: dos a uno. Es decir, una distancia de 34.5 %.
El Periódico Reforma, pese a su férreo anti obradorismo , le da 7 puntos arriba a Claudia.
En síntesis, en febrero, la diferencia promedio entre la mujer del Chongo y el Carnal Marcelo fue de 27.2 % contra 24.6 %. En marzo, Claudia, 34.9 % vs 28.8 % de Marcelo. En abril, 34.4 % vs 30.28 %.
Y en mayo, fue sobresaliente, mientras que Claudia obtuvo en promedio de 40.1 %, Marcelo si acaso llegó al 30.28 %. Una diferencia de 120 puntos porcentuales, que según los conocedores es preocupante.
Las cifras son elocuentes. Los periódicos encuestadores, serios, como Reforma, El Financiero, El Universal, El Heraldo, el País y la página SDP dan un porcentaje muy alto de diferencia entre Claudia y Marcelo.
Estas cifras de las encuestas de cuatro meses, de nueve empresas demoscópicas, indican, o muestran la tendencia del grado de aceptación de las ‘corcholatas’ de Marcelo y Claudia.
Y sin temor a equivocarnos, la ganadora de la encuesta que se realizará del 28 de agosto al 6 de septiembre, será la Claudia Sheimbaum.
Sin embargo, las encuestas válidas serán las del Destapador de la Corcholatas, del coordinador de la campaña de Claudia, el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Mejor nos leemos mañana con
“Las Viudas de las Corcholatas”.
Y “Américo, un político con suerte:
gana la lotería sin comprar billetes.