El polémico fiscal Anticorrupción, Raúl Ramírez, informó el año pasado que Lalo Gattás no se presentó en tres ocasiones a explicar cómo obtuvo una camioneta de $3 000 000 de pesos, propiedad de Sergio Carmona, y de qué ha vivido en los últimos años. Hay una carpeta de investigación en su contra, sostuvo Ramírez, debido a la evidencia de hechos considerados delictivos.
Estos delitos son cohecho, asociación delictuosa,operaciones con recursos de procedencia ilícita ydefraudación fiscal, este último de competencia federal.
La vinculación de Lalo Gattás y Sergio Carmona la presentó Ramírez el 22 de febrero de 2022, en una conferencia conjunta con Román Vasconcelos, titular de la Unidad de Inteligencia Financiera de Tamaulipas, en ese momento, y Ana Lilia Chica, titular del área Especializada en Delitos de Operaciones con Recursos de Procedencia Ilícita.
El año pasado, en medio de la campaña por la alcaldía de Ciudad Victoria, Gattás acusó a los tres funcionarios de perseguirlo, hostigarlo y acusarlo falsamente.
“Estamos convencidos de que lo que a él lo persigue es su reciente pasado”, dijo Raúl Ramírez, “Me refiero a su complicidad con Sergio Carmona y sus empresas. Para esto daremos a conocer algunos detalles”. Así fue la tremenda bofetada que le soltó el fiscal a Lalo delante de la prensa estatal.
La Fiscalía tiene documentos que prueban el vínculo entre Sergio Carmona y Lalo Gattás Báez, debido a la factura y ala matrícula de la camioneta en que viajaba el victorense, registradas a nombre de Grupo Industrial Permart, propiedad Carmona. Luego, una investigación reveló que el empresario se dedicaba al contrabando de hidrocarburos.
La Fiscalía Anticorrupción ha sostenido siempre que hay un nexo entre ambos, y que durante ese periodo, Gattás ha adquirido un patrimonio considerable. La Unidad de Inteligencia Financiera calculó una erogación de 6 millones 617 mil 017 pesos a su nombre en solo 3 meses. Lo llamaron por eso, para que explicara de dónde obtuvo esa suma cuando sus declaraciones fiscales de los últimos cinco años fueron en ceros.
Pero él no se presentó, negó su relación con Carmona y después ganó la elección.
CARMONA SIGUE PRESENTE
El empresario murió asesinado el 22 de noviembre de 2021,pero su imagen sigue latente en el gobierno de Lalo Gattás. Durante el ejercicio fiscal 2022, cinco constructoras de Sergio Carmona fueron contratistas de la administración municipal.
Esas empresas son Cruz Cuadrada Proyectos Y Construcción S.A. de C.V., Daalre Construcciones, S. de RL. de C.V., Grupo Industrial Joser, S.A. de C.V., Grupo Industrial Permart, S.A. de C.V. y Grupo Gargog, S.A. de C.V.
Estas constructoras figuraban en el padrón de proveedores de Ciudad Victoria hasta el último trimestre de 2022. Son demasiadas empresas relacionadas como para que Gattás diga que nunca se trataron de cerca.
Lo peor es que el gobierno de Lalo Gattás cumple a medias o finge cumplir el derecho ciudadano de acceso a la información. Solo ha publicado la lista de estos proveedores y ha omitido lo fundamental: los contratos de las obras o servicios realizados.
Permart y otras firmas de Sergio Carmona han sido proveedores del gobierno de Lalo Gattás, en un claro conflicto de intereses, aun aceptando que la camioneta mencionada se la compró al empresario, lo que nunca comprobó. No puede mediar una relación así entre gobernante y proveedor cuando hubo antes, como particulares, intercambios comerciales. Es peor, desde luego, cuando ese empresario dona o presta bienes a un candidato y después se convierte en su proveedor. Conflicto de intereses en ambos casos.
Si todo es legal y transparente, si nada oculta, ¿por qué no publica los montos pagados por este gobierno al empresario? ¿Cuántos contratos han suscrito en 2023? Incluso, hay qué hacerle las mismas preguntas del fiscal: ¿cuál es la constancia de pago por la compra de la camioneta?
Si la verdad nos hará libres, Lalo Gattás vive como un preso debido a su silencio y a sus mentiras acerca de esta relación, y a la presencia de las empresas mencionadas en su gobierno.
¿Quiere reelegirse? Muy bien. Pero antes que presente toda la información relacionada con los proveedores del municipio y el gasto en obras. Es más, que incluya también su declaración patrimonial al 2023. Que quite de en medio el Comité de Transparencia, usurpador de las facultades que la Constitución da a los regidores para conocer, aprobar, rechazar o modificar todo lo concerniente a la administración pública municipal, como representantes directos que son de los ciudadanos.
Ni Sergio Estrada, ni Daniel Fuentes, ni Felipe San Martín, ni José Manuel Chapa, pueden tener más facultades que los regidores para revisar o decidir qué contratos se publican o no. El reglamento que hubiera para hacer las cosas de ese modo podría anularse con un amparo. Ojalá lo tengan presente los ediles cuando les nieguen la información.
Pero si el camino jurídico fuese largo, invitemos al alcalde Lalo Gattás a abrir la información completa de los contratistas municipales. Así, sin miedo, hoja por hoja, hasta el último expediente. Los victorenses se convencerán de que nada tiene qué ocultar.
O tal vez sí, quizás utilice su “Comité de Transparencia” para encubrir un nombre que lo persigue a todas partes, vaya a donde vaya, como un fantasma: Sergio Carmona.