Desde hace 25 años que Armando Ramos Mejía madruga para llegar al cruce de la calle Linares y Bolivia en la Colonia Felipe Carrillo Puerto.
El objetivo es conseguir una jornada de trabajo para llevar el sustento a su familia.
El hombre reconoce que sabe hacer trabajos de plomería, albañilería, electricidad, carpintería y todo lo que tiene que ver con ayudante general.
La odisea de Armando por encontrar trabajo inició cuando perdió su empleo en el gremio de Alijadores tras el colapso de la organización.
“Yo trabajaba en el gremio de Unido de Alijadores y un día se acabó el trabajo y tuvimos que buscarle donde fuera”
Muchos años antes, recuerda que varios de sus amigos del barrio acudían a la Plaza de la colonia Felipe Carrillo Puerto a la espera de obtener una jornada de trabajo.
“A qué lugar lo conoce mucha gente porque sabe que pueden venir a cualquiera del día y van a encontrar como te decía lo mismo albañiles carpinteros plomeros electricistas ayudantes prácticamente todo el que ocupe alguien que le haga una chamba aquí lo puede hallar”
Ramos Mejía, llega puntualmente a las 7:30 de la mañana y generalmente es de los primeros que obtiene una chambita.
En promedio, dijo que pueden obtener entre 350 a 400 pesos por trabajo de ayudante general y hasta $600 pesos para el maestro.
Diariamente, en el lugar se puede encontrar entre 35 a 40 personas que acuden a la espera de que alguna persona requiera sus servicios en cualquiera de las áreas que manejan.