David Castellanos
“…La sana distancia… Lo ideal para una entidad federativa es que sus universidades públicas en realidad ejercieran su autonomía, esa que va en el nombre pero no sucede así. Al menos no en Tamaulipas, la sana distancia que debería existir entre el Gobierno del Estado y la UAT, no se ejerce hoy, ni ayer, creo que nunca; los gobernadores utilizan la figura del rector de la Universidad Autónoma de Tamaulipas para evidenciar su poderío y fuerza política. A la UAT le llegó el momento, y como dijo Dámaso Leonardo Anaya Alvarado, inician una etapa de transformación. Lo anterior al presidir la ceremonia de honores a la Bandera Nacional con la comunidad universitaria, donde el nuevo rector hizo el compromiso de impulsar una administración abierta, democrática y transparente. El ungimiento de Anaya Alvarado, pero sobre todo lo encomendado será determinante para el futuro inmediato de la UAT. Es cierto, el rector es interino pero será clave en este proceso de transición en el que se sentarán las bases para crear un entorno de desarrollo universitario más allegado al proyecto político impulsado por el gobernador Américo Villarreal Anaya, porque según la visión del mandatario estatal es importante encauzar una nueva ruta para renovar a la máxima casa de estudios de Tamaulipas. Y para ello, tenía que echar mano de un hombre de toda su confianza, Dámaso Leonardo, quien se comprometió de manera personal ante la comunidad universitaria a trabajar para afrontar este proceso de transformación por el que la UAT debe transitar para ascender a una etapa de renovación y mayor crecimiento.