Por: JESUS HERNANDEZ.
El amigo, MARCO BATARSE, ha sido objeto de una perversa campaña, se infiere, orquestada por grupos que se mantuvieron enquistados en la nómina y se enriquecieron a manos llenas. Es una mala estrategia utilizada para presionar a quien por décadas ha servido al gobierno de Tamaulipas desde diferentes trincheras.
Le han inventado historias, queriéndolo hacer pasar como el malo del cuento, pero el actual responsable del área administrativa se mantiene imbatible, soportando el accionar de un gobierno fallido, que por fortuna desapareció, pero se resiste a renunciar a sus cotos y no permitir que sus fichas sean removidas.
Escrupuloso vigilante del erario universitario, MARCO BATARSE, está dando cuentas, descubriendo el hilo negro, los enjuagues y grandes negocios del pasado que se niegan a ser despojado.
Se hable de fuertes cantidades y de personajes inexistentes que durante años subsistieron en el anonimato, recursos que no se justifican y se deben reintegrar, se acabó eso que tanto presumieron, “el que no tranza no avanza”.
BATARSE, está haciendo bien las cosas y rindiendo cuentas a su amigo, el gobernador de Tamaulipas; los que se fueron se acostumbraron al despilfarro, la suntuosidad, eso se acabó, la campaña mediática y el descrédito dirigido continuará, el encargado del área administrativa asume el riesgo, pero no se doblega; que sigan ladrando, señal de que se avanza.