La prefectura de policía de Turín anunció este lunes la prohibición de acceso a estadios a 171 aficionados de la Juventus acusados de comportamiento racista contra el delantero belga del Inter de Milán, Romelu Lukaku.
Como consecuencia de los gritos racistas en la semifinal (ida) de Copa de Italia Juventus-Inter del 4 de abril, la prefectura de policía de Turín realizó, en el marco de la lucha contra el racismo, 171 infracciones de otros tantos aficionados de la Juventus. Serán también objeto de una prohibición de acceso al estadio», indica un comunicado de la prefectura.
La duración de la prohibición no fue precisada. «Gritos de mono», injurias… Romelu Lukaku había sido víctima de insultos racistas en el momento de empatar de penal, al final de la semifinal ida de la Copa de Italia contra la Juventus (1-1), según varios videos.
La Juventus de Turín había sido en un primer momento sancionada par la justicia deportiva con un partido de cierre parcial de una tribuna de su estadio, antes de que esta sanción fuera levantada en apelación.
Romelu Lukaku, expulsado por haber celebrado de forma provocadora su gol, en respuesta a estos gritos racistas, fue «perdonado» el sábado por la federación italiana y podrá por tanto jugar el partido de vuelta previsto el miércoles en Milán.